24 marzo 2008

Draft Document


Pensaba escribirle unas palabras a mi ego esta noche, pero se fue hace días, está parado en la puerta de tu casa suplicándote que me beses otra vez. El idiota está así desde que lo humillaste con una mirada de tus ojos de comiquita.
Pensaba escribirle unas palabras a mi autoestima esta noche, pero me interrumpió mi subconsciente para preguntarme ¿Cuál? Y entonces fue cuando me di cuenta que mi autoestima yacía en el piso de mi cuarto desde hacía dos semanas muerto de penas. Está así desde que se dio cuenta que no siempre se puede hacer lo que se quiere.
Pensaba escribirle unas palabras a mi ironía esta noche, pero
salió desde ayer a beber con mi dignidad, deben estar ebrios en algún bar de segunda planeando el lugar a donde huirán de tus arranques de fin de semana.
Pensaba escribirme unas palabras a mí mismo, pero la verdad es que no estoy aquí, en realidad te estoy
buscando y te estoy huyendo, pero también estoy muerto como mi autoestima.
Pensaba escribir algo, pero… no pasé de aquí.
Pregúntame otra vez por ese CARACOL
Draft document:


Tu mano,
La camisa. (el ombligo no puede faltar)
Obvio. (yo y la duda insistimos)

El tic. (para yo reírme, Y los pelitos de los brazos otra vez se me paran)

Estoy huyéndote por una razón.

Estoy buscándote por mil razones. (Otra vez los pelitos de los brazos)

Estoy huyendo de dos razones.

Estoy buscando lo que me ayuda a huir.
Maldita ironía porque “yo no fui” (el momento de rabia)

Badulaque, necio, tonto, tosco… ¿patán?

¿Y cómo interpreto? Como un tonto, como un patán, como un necio…
Los labios (escribiré algo de lo que quiero, dibujare un peluche en una nube con un pincel de palitos chinos)
Una hoja en un lápiz y te tapas la mitad de la cara para verme.
Sensible. Llora y yo te curo, pero déjame curarte.
Pago la rabia con la silla.

Pura basura. (
porque balbuceo lo que escribo).

19 marzo 2008

1er Pecado


Quiero que sepas que yo he pecado, y seguiré pecando, no pararé
Quiero que sepas que también quiero la paz en el mundo como las modelitos
Y también quiero a los niños de la calle
Evidentemente quiero la ironía
También te quiero lejos de mí mientras te uso y me usas

Quiero que sepas que no soy de hielo, en realidad soy de piedra
Quiero un mundo sin contaminación y sin guerras como niñas bellas
Y también quiero que nadie sea pobre
Insisto en ser hipócrita, pero más que querer, amo la ironía
Quiero tu retrato para mostrarle a todos en que parte te corté

Quiero que sufras sin sentirlo, porque así pecaré más
Quiero que pare el deshielo, y la fractura del ozono
Burdamente quiero felicidad
Quiero reírme mientras se me paran los pelitos de los brazos
Quiero que sepas que me siento mejor porque tengo lo que quiero (de ti), porque uso lo que quiero (de ti), porque sé lo que quiero (de ti) y posdata. También sé lo que no quiero.

08 marzo 2008

Se acaba

Reclámame otra vez las miradas perdidas y verás que se me acaban las excusas. Exígeme otra vez que me ponga de rodillas y notarás que se me acaban las ganas. ¿Un beso?, se me acaba el aliento. ¿Tu futuro?, se me acaban los sueños. ¿Una lagrima?, ya no me quedan. Se me acaban las palabras o quizás los momentos, la verborrea, el “don”, las ganas (otra vez), el tiempo, las sospechas, la poesía, el papel ajado de las tardes aburridas donde escribía, se me acaba el techo blanco donde pienso lo que veo, y la luz fluorescente que titilaba por el balastro dañado. El calor se fue, sé término la saliva que producía tajantes palabras y cortantes oraciones. Y la cuerdita que me agarraba la cortina, y tal vez lo más importante, se me acabo la necesidad, la responsabilidad de repasar los verbos que quería decirte. Se me acabo el tic de la pierna y el hábito de bajar la mirada con la mano a la quijada. Y sé me acabaron las formas de decirte lo que quiero. Por eso te pido otra vez, no a ti a todos, reclámame las miradas perdidas, reclama al niño de rodillas que lloraba… Pregúntame otra vez por ese caracol.
(se me acaban las esperanzas)