Mentiras, mentiras como hierba cortada. Mentiras como lluvia inclemente, falsas mentiras dobles y cortadas otra vez. Como la miseria. Estúpidas mentiras, balbuceadas de tus entrañas. Como la desgracia. Grotescas palabras enredando patrañas. Las escupes como veneno. Las chillas como engendro, basura y solo basura. Mentiras tuyas, mentiras juntas todas y otra vez cortadas por el chisme de tu novio, de tu novia y de tu amante también, de tu padre y de tu madre, de tu vecino mercader proxeneta de sus hijas y su mujer. Del carnicero del abasto, del carnívoro y del que come carne, carne cruda con sangre como la de tu boca que escupe veneno, pero ya lo dije.
Mentiras triples esta vez, mentiras sucias y llenas de tupe. Pero son mentiras blancas, son mentiras piadosas, son mentiritas que no hieren a nadie. Son mentiritas de niños, de bebes sonriendo con vomito, mentiritas de payasos ridículos y sin gracia, mentiritas de periódicos amarillistas, de adolecentes drogadictos, de padres fornicadores, de hijos de papi, de asiáticos negros, de gringas lesbianas, de políticos ricos. Mentiras maldita sea! Y maldita sea!. Todas llenas de nada, todas tuyas y mías y de mi ego. Pero solo de mi ego. Yo nunca miento.
Mentiras triples esta vez, mentiras sucias y llenas de tupe. Pero son mentiras blancas, son mentiras piadosas, son mentiritas que no hieren a nadie. Son mentiritas de niños, de bebes sonriendo con vomito, mentiritas de payasos ridículos y sin gracia, mentiritas de periódicos amarillistas, de adolecentes drogadictos, de padres fornicadores, de hijos de papi, de asiáticos negros, de gringas lesbianas, de políticos ricos. Mentiras maldita sea! Y maldita sea!. Todas llenas de nada, todas tuyas y mías y de mi ego. Pero solo de mi ego. Yo nunca miento.

